Tete llega junto a su padre a un zoológico de Santiago. Al poco andar el niño se entera de que los animales no están porque han decidido comenzar una huelga en contra del presidente, el león Leonel, quien se opone a darles postre a diario. Tete buscará la forma de solucionar el conflicto que tiene molestas a ambas partes, escuchando a todos los involucrados y proponiendo un acuerdo justo, con el objetivo de que el zoológico vuelva a funcionar.